sábado, 31 de julio de 2010

MAO Y NIXON: UN PACTO DE AMOR…

              Nixon-Mao

I. Trasfondo: China y la Unión Soviética, unidas por amor…al comunismo.

Como si fuese una historia de amor, el 14 de febrero de 1950, Stalin y Mao Tse Tung firmaron un pacto de amistad entre China y la URSS. Después del fallecimiento de Stalin las relaciones chino-soviéticas se deterioraron. Ya ambos países no tenían la misma visión sobre el comunismo y la manera de lograr sus objetivos, y como todo noviazgo disfuncional, rompieron la relación.

II. China, en busca de un nuevo amor…

Mao Tse Tung; una de las figuras más influyentes del siglo XX fue el dirigente de la República Popular China desde los años 50 hasta su muerte en 1976 (más de 25 años). Decir Mao, era sinónimo de decir: China. Mao era fiel creyente del socialismo como mecanismo de poder para el agricultor, que era la mayoría de la población de China. Profesaba a través del Partido Comunista su filosofía maoísta: “los países capitalistas nunca permitirán que China avance bajo ese régimen”. Pero sin el apoyo de una potencia como lo era la Unión Soviética, los proyectos de Mao fueron infructuosos y le costaron al pueblo grandes hambrunas.

III. Un prospecto no vislumbrado para el amor… Estados Unidos.

Desde que en octubre de 1950 las tropas comunistas chinas entraron en la Guerra de Corea contra las fuerzas de la ONU (Estados Unidos), para evitar la invasión de Corea del Sur por Corea del Norte desapareció toda intención de establecer relaciones diplomáticas entre China y Estados Unidos.Como China era comunista, Estados Unidos sostuvo un embargo a la China que duró hasta 1972.

IV. Llegaron los 70…llega el “peace and love”… ¿Entre China y Estados Unidos?

En los años sesenta, la ruptura chino-soviética y desilusión con la guerra de Vietnam bajó el sentimiento anti-comunista en Estados Unidos. Aunque Nixon era fuertemente anti-comunista, era de la idea de que China quizás ayudaría a Estados Unidos a terminar la guerra en Vietnam y sería un buen aliado contra los soviéticos. Nixon persuadió al escéptico Mao de que Estados Unidos ya no representaba una amenaza para China y que podría ayudar a resistir la presión soviética. En 1971, Nixon comenzó un diálogo con China y hasta pidió que la entraran en la ONU. Nixon hacía todo esto con la idea de que un socio en la lucha contra la Unión Soviética era lo más importante. En el 1972, Nixon viajó a China y se entrevistó con Mao. Nixon decidió que China constituía una potencia que debía ser considerada favorablemente en la Guerra Fría con la Unión Soviética y eliminó el embargo comercial a China.

V. El comienzo del noviazgo… “ el amor y el interés se fueron al campo un día”…

En 1973, China y Estados Unidos se convirtieron en aliados. La apertura de China por Nixon equilibró el poder durante la Guerra Fría y alivió la incertidumbre china de un posible ataque soviético, permitiendo a Estados Unidos despreocuparse y poder concentrar su poder militar en Europa y otros países. Fue un momento decisivo que contribuyó finalmente a la desintegración de la Unión Soviética y el fin de la Guerra Fría.

VI. Estados Unidos logra dejar en el olvido a la Unión Soviética…y ahora, que hacer con China, la novia desatendida?…¿Quien es ella hoy día?

Tras la muerte de Mao, el dirigente del Partido Deng Xiaoping tomó el poder e impulsó una serie de reformas económicas, abandonando muchas de las políticas de nacionalización y colectivización que habían caracterizado a Mao. Bajo la dirección del Partido Comunista, se comenzó a fomentar la creación de empresas privadas, la entrada de capital extranjero para financiar infraestructura y una base industrial que en ese momento, finales de los años 70 era aún muy pobre. A partir de 1979 se aceleraron las reformas económicas de tipo capitalista, aunque manteniendo la retórica de estilo comunista. A Deng Xiaoping lo sucedieron en el poder sucesivamente Jiang Zemin y Hu Jintao, actual Presidente.

Actualmente China es el país más poblado del mundo con más de 1,300 millones de habitantes, con la 5ta parte de la población mundial. China aún sigue siendo una república socialista gobernada por el Partido Comunista de China. China es el primer exportador mundial y poco a poco se está convirtiendo en una superpotencia mundial.

Desde 1992, China es la mayor potencia manufacturera del mundo debido al bajo costo de la mano de obra. Los tratados comerciales entre China y Estados Unidos aún permiten el ingreso de las manufacturas chinas a través de aduana como si fueran fabricadas en territorio norteamericano. En el 2007 China reconoció por primera vez la propiedad privada mediante ley. Gracias a estas estructuraciones y a que los chinos son trabajadores incansables, China tiene un crecimiento fijo de 10% anual y se ha mantenido así por años.

El déficit comercial anual estadounidense con China es de 186,000 millones de dólares. Recientemente, Estados Unidos ha querido imponerle restricciones comerciales a China para que se ajuste a sus reglas de mercado (cometiendo intervencionismo estatal) porque Estados Unidos esta sufriendo las consecuencias del colapso del mercado por su consumo desmedido y dependencia de la producción. La realidad es que este déficit es en gran medida consecuencia de la ineficacia de EE.UU. y no de las restricciones comerciales chinas. China tiene los aranceles más bajos de los grandes países en desarrollo.

Y mientras, nos preguntamos: ¿Hasta cuando podrá sostener los Estados Unidos este noviazgo que comenzó sin amor, basado sólo en interés y que le está costando caro día a día al ciudadano americano que pierde sus empleos a manos chinas? Podríamos preguntarles a los budistas chinos, campesinos y trabajadores en las fabricas que cada día progresan más, fruto de su trabajo explotador a ver que nos contestarían sobre las causas y consecuencias de todo esto: “Baby; it’s KARMA”.

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